Ella es mi reina
y la eternidad,
del amor sublime
que es mi heredad.
Incansable luz
que me alumbró en la vida
mi altesa real
Es sol y oro
que alegra mis días,
es luna y plata que arropó
mis noches sombrías
con esos benditos resos
inmersas de soledad
mecida en su inmensidad
recoriendo su castillo de humildad
Arrullos de cielos me llegan
tienen melodía angelical
y sus labios canta y besa
y sus ojos rien y lloran
si un día me ve llegar
Y un nudo se nos atora
siempre al marchar
pronto junto las manos
el SEA pongo al partir
no hay palabras qué decir
solo su 'bendición mama'
es como señal final de mi ir.
Como si algo sagrado me cubre ya
emprendo la retirada
Y cual la madre virginal
Sé que siempre espera
sin reclamar
Por eso en mi cielo lejano
eres mi lucero inquieto en el alma
y radiante del corazón
que sin cesar me hace suspirar
y a veces hasta llorar
Mas en mis ruegos al cielo
nunca tu nombre ha de faltar
ángeles en tu puerta estan
Deben cuidar mi tesoro
Mi diamante mas brillante y real
Mi reina de la vida,
Mi majestad,
Usted ... querida mamá.
Salve reina madre !!!
Larga vida, mamá !!!
© Margarita Schaerer (15/05/2025)
Asunción - Paraguay